Mucho se había especulado estos días sobre la renovación de contrato de Ousmane Dembélé con el FC Barcelona, sin embargo, ayer se dio la noticia que se habían roto las negociaciones debido a las exigencias de los representantes del extremo francés, lo que parecía una reducción importante de su salario, terminó siendo una petición de aumento para quedarse en el Barça, algo completamente ilógico, pide un salario de crack mundial, cuando lleva 4 años sin ser determinante en el Barcelona, y sin mostrar absolutamente nada, además de sus constantes lesiones, que lo han hecho perder gran cantidad de partidos. El Barcelona con los problemas económicos que tiene no se puede dar el «lujo» de aceptar sus condiciones.
Ahora bien, Ousmane Dembélé y sus representantes saben muy bien los problemas que el Barça enfrenta, lo que parece importarles poco, y de lo contrario quieren más pasta. Todo apunta a que El Mosquito terminará saliendo del club en este mismo mercado de invierno apenas le llegue una oferta más tentadora, lo que lo convertiría en una réplica exacta de lo que hizo el canterano Ilaix Moriba: exigir más dinero sin aún haber hecho nada importante.